Arda por siempre en el infierno tu imprenta imborrable
grabada a sangre y fuego en terreno antes impenetrable.
Desgárrese en trágicas notas mi voz ardiendo
enloquecida soñando que estas conmigo cuando despierto.
Salga de mi esta maldición que me condena
a la inefable desdicha de tu ausencia eterna,
salga de mi este amor sin dueño
estas ansias de verte, de sentir tu cuerpo.
Sostenme fuerte con tus brazos, cadenas
átame a tu amor, hazme cumplir la condena.
Apresa mi corazón con tus falanges de hierro
hazme tuya, engánchame, sé mi dueño.
Ámame, ámame con desconcierto
Ámame y detén el tiempo
Ámame y quédate conmigo
aunque solo sea por un momento.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario